miércoles, 31 de diciembre de 2014

Balance egocéntrico



”Para alcanzar algo que nunca has tenido, tendrás que hacer algo que nunca hiciste”…decían mis primeros días del 2014, ese cuadro incalculable que me llegó por correo era el principio...después tomé un café con una persona que hacía por lo menos quince años que ni nos veíamos ni hablábamos, quizás porque nunca lo hiciéramos, volví a suspender ese dichoso examen tres veces, pero me dio igual…regresé a una ciudad espléndida que hacía daño en los recuerdos, acudí a exposiciones, aprendí de lo más pequeño y de los más cabrones, me enamoré de la belleza de una mirada, deshice propósitos…tragué nieve y me deslicé en picado, bordee slalows, salté en esquís… cumplí cadenas y ayudé a desconocidos…escuché las mejores risas de una infancia enferma…vi películas que lastiman, que pervierten y enamoran…escuché música y susurros que derriten, me reí de mí, pasé tiempo en familia, dejé la vergüenza con mi ropa en el suelo, tuve un accidente de coche, apunté sin disparar, disparé dónde no era…, aprendí teoría queer, grafología, cocina…, me bauticé en buceo, viajé a muchas ciudades, las repetí y reconquisté, fui a congresos, jornadas, programas de radio, microsabiertos, musicales, conciertos…cambié la maleta por una mochila, crucé la raya, conocí gente nueva, defendí mis derechos, probé sabores, me eché a correr entre las calles de una gran ciudad, subí corriendo al lado de la torre que ha hecho nuestra mejor fotografía… compuse versos, viajé a otros países, farfullé en otros idiomas, me sentí sola, me sentí querida...fui decepción y error...volví a entrenar, hice el payaso,  jugué, leí, conduje km y km, cuidé de animales, trabajé, perdí personas a las que quiero, me reencontré con otras, cumplí promesas, intenté deshacerme de otras que debo dejar ir,  subí montañas, me perdí en el bosque, confié mi día a un desconocido, desconfié de amig@s, abandoné esfuerzos y luchas, no quise saber de mí ni de los demás, me olvidé de quién quiero ser, me dejé llevar por lo superficial, estuve confusa y sigo siendo dudas y precipicios,  alivié con un abrazo, me mojé de lágrimas, me bañé en silencios, grabé voces y sonidos, hice imágenes que me perdurarán, recibí regalos insospechados,  me colé en camerinos, me ofrecieron entradas a ilusiones, temblé de miedo y de placer, me chuté dosis de valentía, no acepté y me rendí, toqué algún que otra acorde, quise irme y me quedé, me fui cuando otros quisieron quedarse, paseé conmigo misma de madrugada, me ahogué, no supe salvar, seguí esperando, no fui capaz, ni suficiente...provoqué sonrisas, besé otros labios, mordí con ganas, jamás olvidé, di la mano en una caricia, me volví ternura, volví a sentir…a Vi-Vir…




Termino el año con un vaso que dice… “Si puedes soñarlo, puedes hacerlo”… ¿Y ahora qué? …



365 días



M.Q.S

No hay comentarios:

Publicar un comentario